Erkan Aydoganoglu
Sndcato de Trabajadores de la Educacón y la Cenca (Egtm Sen) – Turquía
Para que la educación se considere como un derecho no basta con hacer ciertos arreglos. Para poder hablar del derecho a educación moderna y califi cada, la educación debe incluir a todos, debe ser proporcionada durante tiempo sufi ciente, debe ser accesible de por vida, debe ser gratuita con una comprensión pública, su contenido debe ser contemporáneo, científi co y secular, y se debe proporcionar en diferentes idiomas maternos además del idioma oficial.
Hoy en día, se prefi ere utilizar la defi nición de „el derecho a educación“ en lugar de utilizar la defi nición de „educación obligatoria“. Porque es necesario aceptar el logro tan importante como „el derecho a educación“, que es un derecho principal de humanos, como un derecho que todos deberían disfrutar y no como una obligación. Esta defi nición signifi ca el uso del concepto de „derecho a la educación“, que es más adecuado para la comprensión estatal democrática contemporánea, en lugar de la „educación obligatoria“, que se relaciona con el enfoque del „estado opresivo“. Al hablar del derecho a la educación, lo primero que viene a la mente es el concepto de „igualdad“.
La igualdad de oportunidades en la educación es una expresión de uso frecuente que signifi ca que todos pueden disfrutarse de las oportunidades educativas de manera igual. El concepto de igualdad, que expresa un juicio de valor, no simboliza solamente una igualdad matemática y simple. Las expresiones de igualdad mencionadas en las leyes, solamente cuentan con un signifi cado legal.
En realidad, no se puede decir que cada individuo se benefi cia de una manera „igual“ del derecho a la educación y de las oportunidades de educación. Al contemplar el tema desde otro punto de vista, podemos entender que proporcionar mismas oportunidades educativas a todos no signifi ca proporcionar sufi ciente „derecho a la educación“ a todos. La estructura demográfi ca y las condiciones de vida de la sociedad, las necesidades de los individuos, las diferencias en las habilidades, etc. pueden requerir el ofrecimiento de diferentes oportunidades educativas. Así que, a fi n de proporcionar una educación completa, sería más adecuada adoptar el concepto de „derecho a la educación“ en lugar de „igualdad educativa“.
Para poder hablar de un acceso igualitario al derecho a la educación, se debe ofrecer una educación con acceso físico y económico. Todos los acuerdos internacionales que regulan el derecho de acceso a la educación, cuentan con la obligación de garantizar este derecho sin discriminación.
Derecho a la Educación y Comercialización de la Educación
El derecho a la educación se ha incluido en muchas declaraciones y convenciones internacionales, especialmente en la Declaración Universal de Derechos Humanos publicada en 1948. El hecho de que el derecho a la educación se incluyera en la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948 fue el comienzo de los esfuerzos extensos de las Naciones Unidas (ONU) para desarrollar los derechos sociales, económicos y culturales en línea con los derechos civiles y políticos. La carácter indivisible de estos derechos está garantizada por la Convención sobre los Derechos del Niño fechada 20 de noviembre de 1989. Gracias a la dicha convención, lo que antes se consideraba como las necesidades de los niños se convirtió en un derecho que se puede solicitar al estado y a la comunidad internacional.
El artículo 28 de la Convención sobre los Derechos del Niño reconoce el derecho a la educación de los niños y obliga a los Estados fi rmantes a proporcionar educación básica, obligatoria y gratuita a los niños, organizar la educación secundaria en diversas formas, generales y vocacionales, y mantenerlos accesibles a todos los niños. Al lado de esto, la convención impone a los estados diferentes tareas, entre estas tareas se pueden mencionar las siguientes; mediante el uso de todas las herramientas apropiadas hacer que la educación superior esté abierta a todos los niños en línea con sus habilidades, proporcionar información y orientación sobre la educación y la elección de carrera de todos los niños, mantener el respeto del niño como humano en todos los asuntos disciplinarios.
Después de que el derecho a la educación se aceptara como un derecho humano, en muchos países capitalistas y desarrollados el derecho a la educación gratuita salió al primer plano. Sin embargo, el neoliberalismo, que ganó más fuerza desde mediados de la década de 1970, argumentó que la libre competencia debería ser válida también en el campo de la educación como en todos otros campos, y afi rmó que las economías nacionales solamente podrían obtener una calidad competitiva llevando los campos de educación y salud „dentro del mercado“, o sea, realizando la comercialización y privatización de la educación.
Como que es uno de los servicios públicos más comunes, el sistema educativo siempre tuvo una importancia central. Por esta razón, es inevitable que cualquier cambio realizado en el campo de la educación por el benefi cio del mercado afecte la vida social y otros servicios públicos. Debido a lo cual, al igual que pasó en América Latina en el pasado, el campo de la educación cuenta con funciones básicas en términos de reorganizar los espacios públicos conforme a las necesidades periódicas del capitalismo.
Al igual que todos los campos de la vida social, el campo educativo también se aleja de sus funciones públicas y sociales y se transforma en un „sector económico“ conformado por una lógica „competitiva“ de acuerdo con el mecanismo de „libre mercado“. Desde la segunda mitad de la década de 1970, se han generalizado muchas aplicaciones para la privatización de los servicios educativos poco a poco, y las prácticas de privatización de la educación comenzaron a implementarse liquidando gradualmente el derecho a la educación pública especialmente en los países subdesarrollados y corruptos con la distribución injusta del ingreso, tales como los países de América Latina y Turquía.
Practicas de Privatización en la Educación y Escuelas Privadas
Al lado del hecho de que en los últimos años la educación, que es un derecho público, se ha incorporado rápidamente al mercado, se inició el proceso de calculo para defi nir cuáles de los componentes básicos de la educación son más rentables para el mercado y las políticas educativas fueron determinadas e implementadas conforme a estos cálculos.
En Turquía, que cuenta con una población de 82 millones, existen 18 millones de estudiantes y más de 1 millón de profesores, incluyendo 170 mil profesores que trabajan en las escuelas privadas. La mayor responsabilidad de las practicas de privatización y alejamiento del campo público de la educación en Turquía pertenece al AKP que se encuentra en el gobierno desde hace 18 años. En el año 2002 la proporción de escuelas privadas en el sistema educativo era del 1.9 por ciento, esta tasa se acercó al 10 por ciento en el mes de enero del año 2020. Este aumento también refl eja el pago que realiza el estado como ayuda por cada estudiante de las escuelas privadas. La educación pública está siendo liquidada paso a paso en Turquía y la proporción de los recursos públicos destinados a la educación disminuye cada año, como la consecuencia de ello está aumentando gradualmente el gasto en educación de los hogares.
En Turquía, la propiedad de la mayoría de las instituciones educativas sigue siendo propiedad del Estado, pero, a pesar de esto, una parte importante de los servicios prestados en las instituciones educativas se ha comercializado. Las prácticas de comercialización y privatización de la educación a veces son obvias, pero en su mayoría no se pueden contemplar a primera vista. Todos los cambios que se experimentan en la educación como ‚privatización secreta‘, fueron implementados de manera planifi cada en los últimos 18 años. La mayor parte de educación se lleva a cabo en escuelas públicas, que con el tiempo alejaron de ser una institución educativa, y como resultado de esto la participación de la gente en la fi nanciación de la educación está por encima del promedio de la OCDE.
La razón principal del surgimiento de las políticas de privatización en la educación está oculta en los problemas estructurales que enfrentan los mecanismos del mercado, no los mecanismos públicos. Los mecanismos de mercado, que no pueden superar el problema de las bajas ganancias en el área que se les asignó, tienen como objetivo superar su crisis abriendo áreas de inversión rentables, tal como la educación.
En Turquía, los recursos públicos en lugar de ser utilizados para las escuelas públicas, se transfi eren a las escuelas privadas bajo el nombre de incentivos, y esto profundiza las desigualdades en la educación y diferencias entre las escuelas escuelas. Esta situación no se conformó con clasifi car las escuelas como escuela pública y escuela privada. Al lado de esto, abrió el camino para crear diferentes „escuelas públicas“, hasta crear diferentes aulas dentro de la misma escuela pública conforme a los diferentes niveles de ingresos o conforme al nivel de éxito.
Transferir los recursos del presupuesto educativo que están reservados para escuelas públicas y dormitorios estudiantiles, a las escuelas privadas bajo varios nombres, signifi ca utilizar los impuestos de todos los ciudadanos del país contra el interés público. Uno de los principios fundamentales del derecho a la educación pública, que es la responsabilidad principal del estado, es garantizar que la educación sea accesible para todos en condiciones iguales.
La apertura del campo educativo al mercado por las políticas neoliberales ha aumentado el número de escuelas privadas. Indiscutiblemente, la privatización de la educación no se limita a la apertura de instituciones educativas privadas. También la privatización de servicios tales como alimentos, transporte, seguridad, limpieza, etc. en las escuelas públicas, y la preparación del plan de estudios conforme a las necesidades del mercado se debe considerar dentro del alcance de la privatización de la educación,
Camino Hacia Quiebra de Escuelas Privadas En Turquía
A fi nales de 2019, en Turquía existía un total de 12 mil 809 escuelas privadas (preescolar, primaria, secundaria y preparatoria). En Turquía, después de los cambios importantes realizados en sistema educativo en el año 2012, el número de escuelas privadas se ha aumentado de manera rápida. Después del arreglo de 4+4+4 en educación, la proporción de estudiantes de escuelas privadas aumentó signifi cativamente en relación con los estudiantes de escuelas públicas. La proporción de estudiantes que estudian en escuelas privadas es de 8.7 por ciento en total. El 16.5 por ciento de los estudiantes que estudian en escuelas privadas están en educación pre-primaria, el 5 por ciento en la escuela primaria, el 6.2 por ciento en la escuela secundaria y el 13.7 por ciento estudia en la secundaria.
La crisis económica que estalló en Turquía en la segunda mitad de 2018, afectó signifi cativamente tanto la mayor parte de la comunidad como las escuelas privadas. El aumento en el número de escuelas privadas de 6 mil 710 a 12,500 solo en los últimos cuatro años, ha alterado el equilibrio de la oferta y la demanda en este campo, y solo se ha llenado el 40 por ciento de las cuotas de las escuelas privadas. Debido a la crisis económica en 2019, muchas escuelas privadas se cerraron y muchos estudiantes y maestros fueron víctimas. Conforme a un comunicado de la Asociación de Escuelas Privadas de Turquía, cerca de 200 escuelas privadas experimentaron el cierre o la quiebra.
Una parte importante de los propietarios de las escuelas privadas en Turquía, se dedica a otras áreas de negocio (especialmente en el sector de la construcción). Como que la crisis económica afectó principalmente al sector de la construcción, también afectó a los propietarios de escuelas privadas que también operaban en este campo. Por ejemplo, el propietario de Doğa Koleji, que tiene 411 escuelas, 82 mil estudiantes y 13,500 empleados en 51 ciudades de todo el país, ha llegado al punto de quiebra debido a la crisis, ya que su trabajo principal era la construcción. En Doğa Koleji, los maestros no pudieron cobrar sus salarios durante 5 meses, y las clases no se pudieron seguir de manera saludable. Mientras los maestros dejaron el trabajo para cobrar sus salarios, los padres y los estudiantes que pagaron por adelantado al comienzo del semestre se convirtieron en víctimas.
Los problemas económicos experimentados en las escuelas privadas nos muestran lo qué pasa cuando se ignora que el derecho a la educación también es un derecho público. El sistema educativo centrado en el mercado promociona claramente la competencia en todos los niveles de la vida, los servicios pagados, lo que convierte los estudiantes y los padres en „clientes“. El resultado más concreto del sistema de escuelas privadas en los países con una distribución corrupta de los ingresos y en países subdesarrollados, es que no todos pueden benefi ciarse del derecho a la educación en igualdad de condiciones y las diferencias de clase en la sociedad se hacen más evidentes. Signifi ca una violación del derecho a la educación no solo el aumento en el número de escuelas privadas, sino también la formación de diferentes aulas dentro de la misma escuela, la competencia de diferentes escuelas en la misma región y la organización de la educación conforme a las reglas del mercado.
Hay Que Defender el Derecho a la Educación Pública
Transferir los recursos del presupuesto educativo que están reservados para escuelas públicas y dormitorios estudiantiles, a las escuelas privadas bajo varios nombres, signifi ca utilizar los impuestos dccccc todos los ciudadanos del país contra el interés público. Uno de los principios fundamentales del derecho a la educación pública, que es la responsabilidad principal del estado, es garantizar que la educación sea accesible para todos en condiciones iguales.
La educación pública signifi ca que el poder político y el aparato estatal se esfuerce por satisfacer las demandas de clase y las demandas democráticas, y que el servicio educativo sea igual, gratuito, califi cado y accesible para todos. Para poder hablar sobre un derecho a la educación que todos puedan benefi ciarse de manera igual, la educación debe ser físicamente y económicamente accesible. Todos los acuerdos/ leyes nacionales/internacionales que regulan el derecho de acceso a la educación, cuentan con la obligación de garantizar este derecho sin discriminación.
Lo que se requiere es evaluar los recursos públicos para la educación, que es un derecho público, considerando los intereses sociales, no los intereses privados. No se puede aceptar que se disminuya los presupuestos educativos debido a la crisis económica. Lo que hay que hacer primero, es aplicar el derecho a la educación pública. A fi n de poder realizarlo, la proporción de los presupuestos educativos al ingreso nacional se debe llevar al promedio de OCDE (6%). Se debe evitar que los recursos públicos se transfi eran a las escuelas privadas, y cada país debería asignar un presupuesto sufi ciente para educación y conformar las necesidades de las escuelas públicas. Se debe aumentar la parte asignada a las inversiones educativas y se debe poner fi n a todas las prácticas legales y de facto que causan que la educación no sea un derecho humano básico y que conducen a la privatización de la educación. Existe una situación de doble sentido para quienes luchan por el derecho a la educación. O el sistema educativo y las escuelas se entregarán a las relaciones capitalistas dominantes o se luchará para que todos disfruten del derecho a la educación en condiciones iguales.