/EL ANTÍDOTO DEL SISTEMA SANITARIO DESTRUIDO POR EL VENENO DE LA PRIVATIZACIÓN: UN SISTEMA DE SALUD NACIONAL, PÚBLICO Y POPULAR! – DR. DERYA UĞUR

EL ANTÍDOTO DEL SISTEMA SANITARIO DESTRUIDO POR EL VENENO DE LA PRIVATIZACIÓN: UN SISTEMA DE SALUD NACIONAL, PÚBLICO Y POPULAR! – DR. DERYA UĞUR

DR. DERYA UĞUR
PRESIDENTA DE GENEL SAĞLIK-İŞ (SINDICATO GENERAL DE TRABAJADORES DE LA SALUD) • TURQUÍA

La grave crisis económica de nuestro país y la incapacidad de los líderes políticos para gobernar han provocado el colapso de nuestro sistema sanitario y el agotamiento de los trabajadores sanitarios. Conocemos muy bien que la situación que vivimos hoy no es una coincidencia, sino el resultado de años de políticas orientadas al mercado.

En el presente artículo, trataré las causas fundamentales de esta grave situación en el sector sanitario y las políticas que podrían conducir a una solución real, es decir, una salida a esta crisis.

Pese a la fuerte presión fiscal, nuestro país es cada vez más incapaz de prestar servicios sanitarios públicos a sus ciudadanos. Los ciudadanos quepagan sus impuestos esperan disfrutar de los derechos sanitarios garantizados por la Constitución, pero lo que encuentran ya no es un sistema público, sino estructuras privadas impulsadas por el lucro. La sanidad ha sido despojada de su condición de derecho social y se ha entregado al mercado.

En la actualidad, los ciudadanos no pueden acceder ni siquiera a los servicios sanitarios más básicos, y hasta conseguir una cita se ha convertido en una lucha titánica. Los trabajadores sanitarios se ven empujados al agotamiento por una espiral de dificultades económicas, acoso e inseguridad. Los medicamentos y tratamientos vitales quedan fuera del alcance estatal, mientras que se afianza el concepto de sanidad de pago.

Las instituciones y organizaciones públicas que prestan servicios de salud han sido sistemáticamente debilitadas debido a años de políticas equivocadas. El modelo comercializado bajo el nombre de „Programa de Transformación en la Salud“ es, en realidad, la liquidación del sistema público de salud. Se ha desatendido a los hospitales públicos, se ha ignorado la falta de personal.

Los hospitales estatales, que antes eran fácilmente accesibles para todos los ciudadanos, han sido sustituidos por enormes edificios trasladados a las afueras de las ciudades. Estas estructuras, denominadas „hospitales Urbanos“, no se planificaron para satisfacer las necesidades públicas, sino para transferir beneficios al capital. El número de pacientes garantizados a los aliados ha primado sobre el derecho de los ciudadanos a la salud. Este planteamiento ha movilizado los recursos públicos no para el pueblo, sino para el capital.

La apertura del sector sanitario al mercado ha abaratado el trabajo de los profesionales de la salud y devaluado su profesión. La falta de competencia y la inseguridad prevalecen en las instituciones públicas. La presión por el rendimiento que se impone a los trabajadores, la privación de sus derechos personales y la constante falta de supervisión son otra cara de la decadencia del sistema sanitario.

Llegados al punto en que nos encontramos hoy, la privatización de la sanidad no es solo una elección económica, sino una orientación política.

• Transferir la propiedad pública al capital es robar a la población.
• La mercantilización de la sanidad es una violación de los derechos humanos.
• Eliminar la supervisión pública es ser cómplice de un delito social.
• La privatización de la sanidad es una enfermedad que se ha extendido por las venas de este país. Esta enfermedad solo puede curarse volviendo a una forma de entender la sanidad que tenga como orientación el interés público.

POR UN SISTEMA DE SALUD
PÚBLICO, POPULAR Y EQUITATIVO:
La solución a los problemas identificados anteriormente yace en el restablecimiento de un sistema sanitario público, populista y equitativo, defendiendo la República y las Revoluciones Republicanas.

En este contexto:
must be implemented.
• Se debe poner fin a las políticas que mercantilizan la asistencia sanitaria; se deben volver a implementar las políticas sanitarias nacionales, públicas y populares iniciadas por Atatürk.
• Las duras y precarias condiciones laborales de los trabajadores sanitarios deben rectificarse de inmediato.
• Hay que establecer una tolerancia cero con la violencia en la asistencia sanitaria y promulgar urgentemente una ley eficaz y aplicable contra la violencia en la asistencia sanitaria.
• Hay que erradicar las prácticas que perturban la paz laboral y victimizan a los trabajadores sanitarios, como los pagos fijos, los salarios basados en el rendimiento y los incentivos.Hay que aumentar los salarios en un solo pago, de manera que se reflejen en la jubilación, por encima del umbral de la pobreza y de forma gradual según la categoría del personal.
• Hay que solucionar la escasez de personal y contratar a un número suficiente de trabajadores sanitarios.
• ¡La igualdad es fundamental! Hay que garantizar a todas las personas Traducción del turco al inglés y al español: PoliTeknikunos servicios sanitarios iguales, gratuitos, accesibles y de calidad.
• Hay que asignar recursos públicos suficientes a los servicios sanitarios; hay que dar prioridad a los servicios de atención sanitaria preventiva en la planificación presupuestaria.
• Hay que tener en cuenta la estructura epidemiológica en el sistema sanitario y planificar servicios de protección y promoción de la salud.
• Hay que planificar en función de las necesidades sociales, no de la demanda de atención médica estimulada.
• Hay que fortalecer los servicios de atención primaria y crear una cadena de derivación eficaz.
• Hay que ampliar los servicios de salud materno-infantil, salud adolescente y atención médica preventiva.
• Hay que aplicar políticas de formación del personal sanitario basadas en la ciencia.
• Hay que fomentar la producción nacional de dispositivos médicos y medicamentos, y hay que formar a los recursos humanos en este campo.
• La seguridad alimentaria y un medio ambiente saludable son partes integrales de la salud pública. No se deben tolerar los juegos del capital global en estas áreas.
• Hay que garantizar la participación de las organizaciones laborales y profesionales en la determinación de las políticas sanitarias.
• Hay que aplicar de inmediato políticas de salud pública que defiendan a los trabajadores, la ciencia y la población.