Ajay Lachhman

Intentar que el Consejo de las Naciones Unidas vote es como moverse en un complejo laberinto. El proceso requiere un consenso internacional entre socios de diversos campos para crear un impacto significativo y respuestas positivas por parte de los funcionarios de varias agencias de la ONU. En su esencia, el viaje comienza con el inicio de diálogos con organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, lo que requiere un enfoque de marketing social intrincado.

Este proceso complejo se desarrolló en el marco de la Conferencia de Educación Continua, celebrada en el hotel Southern Sun de Sudáfrica, que sirvió de momento crucial para el desarrollo de la iniciativa en nuestra búsqueda colectiva. La Conferencia ha servido como plataforma para congregar a las partes interesadas y allanar el terreno para una colaboración acorde con los objetivos del Proyecto 26.

El programa de la conferencia internacional en Sudáfrica fue un encuentro de personas de diversas procedencias, todas ellas con un objetivo común. La diversidad de esta representación es un ejemplo de unidad en nuestra búsqueda colectiva de objetivos educativos comunes.

Un momento culminante de esta experiencia transformadora fue el honor de colaborar con la estimada Ministra de Educación Básica, Matsie Angelina Motshekga, en representación de la República de Sudáfrica. Su presencia destacó la urgente necesidad de mejorar las condiciones educativas en todo el mundo, añadiendo peso a nuestra causa…

Las voces resonantes de pensadores progresistas del mundo académico enriquecieron aún más el discurso. Dr. Maharaj, Prof. Neema Abooki, de la Universidad de Makerere (Uganda), y Prof. Salim Valli marcaron colectivamente la pauta para un cambio de paradigma en el sistema educativo mundial, en perfecta consonancia con los ambiciosos objetivos del Proyecto 26.

El Foro de la Diáspora Africana se hace eco con especial urgencia de la difícil situación de los refugiados y desplazados. Los más vulnerables en su búsqueda de educación son los niños de comunidades amenazadas desde el punto de vista de la economía, la seguridad y el medio ambiente. El impacto social y psicosocial en estos niños exige respuestas inmediatas y globales para allanar el camino hacia un mundo más igualitario y pacífico.

Observar cómo un socio comprometido, el Sindicato Sudafricano Democrático de Profesores (SADTU) y sus colaboradores invierten una energía considerable en movilizar los esfuerzos regionales es una fuente de inmensa esperanza para el futuro. La experiencia superó las expectativas y dejó una huella indeleble como punto de referencia para futuros esfuerzos. Los aspectos tratados en la declaración subrayan los grandes retos y las áreas por explorar, empujándonos hacia delante en nuestro proyecto de extender los derechos humanos a la educación a escala mundial.

A medida que reflexionamos sobre este viaje transformador, se hace evidente que el compromiso colectivo y la colaboración presenciados en la Conferencia Continental de Educación nos sirven de guía para avanzar hacia un futuro en el que la educación no sea sólo un derecho, sino una realidad universalmente accesible.

Ajay Lachhman
Congreso Sindical de Mauricio MTUC
* Este artículo se publica simultáneamente en PoliTeknik
edición turca, PoliTeknik International y
PoliTeknik Español.